martes, 23 de noviembre de 2010

Aún sin título (50)

Un pasillo del MNAC, Barcelona 2010

Adiós

Nos separamos,
en su mirada se alojó la distancia,
sus ojos me exploraban,
y cuando me levanté para irme,
su voz suave acarició mi alma,
como el tejido de una servilleta
de papel oriental.
-Adiós.
-Hasta siempre -respondí.
Nos alejamos sin más nada,
y se nos adueñó el olvido.


No hay comentarios: