viernes, 16 de julio de 2010

Aún sin título (23)

Rambla Cataluña, Barcelona 2010

Consejos a mi hijo

Siempre estará conmigo
el deseo de contar cosas,
de revelarte, hijo mío,
esencias como estas, y otras,
que nunca te podré explicar:
"Existe algo más en el mundo
que la arrogancia, hijo mío,
que la soberbia o la vanidad;
estas palabras encendidas,
cargadas de sabiduría
y por el peso de la verdad,
son sólo un pretexto, hijo mío,
para desatar en el universo
las fuerzas que todo lo mueven,
que lo hacen estallar todo,
todo lo que la disciplina
y el orden humanos intentan ocultar.
Todas las grandes pasiones
son desesperadas, hijo mío,
no tienen ninguna esperanza,
porque en ese caso no serían pasiones,
sino contratos, negocios razonables,
comercio de menudencias.
Todas estas, y muchas más,
son cábalas, hijo mío,
que te abordarán, sin pedir permiso,
cada vez que intentes definir
los pasos más pertinentes
para cada encrucijada de la vida."

1 comentario:

FRANCISCO PARDÓ dijo...

Amigo, Me trajo el grato recuerdo de mi padre, un pasado que supo colmar mis dias de felicidad... Salud amigo, Padre en corazón y alma!